Ciudad de México, 21 ago (Prensa Latina) Mario Delgado, líder de Morena, auguró fractura del opositor Frente Amplio por México y ya comienzan a pelearse, dijo, pero existen también tensiones en su partido entre los precandidatos presidenciales.
Medios de prensa y redes sociales priorizan hoy las presuntas discrepancias entre los líderes de los tres partidos de oposición, Acción Nacional (PAN), Revolucionario Institucional (PRI) y Revolución Democrática (PRD) en torno a las precandidatas panista Xóchtl Gálvez y la priísta Beatriz Paredes, pues da la impresión de que se rompió el pacto en favor de la primera.
Algunos comentaristas consideran que el problema se deriva de las encuestas que no dan números absolutos a favor de la senadora Gálvez ni esta ha logrado escalar a los niveles que esperaban en cuanto a la aceptación popular
Y sin embargo, la veterana política y expresidenta del PRI, sí lo ha logrado a pesar de que prácticamente no ha hecho campaña proselitista.
Delgado recordó que a la alianza le quedan dos etapas para elegir a su candidata -una encuesta y una consulta-, que es un formalismo o simulación porque la escogida de antemano era Xóchitl por acuerdo que favoreció al PAN y le fue criticado al presidente del PRI Alejandro Moreno por rebajarse ante su antiguo rival.
Ello provocó una estampida de militantes priístas, incluidos senadores y diputados, quienes crearon un grupo independiente fuera del partido y otros se corrieron a otras agrupaciones.
Delgado dijo, sin mostrar elementos de prueba, que las encuestas indican que las dos mujeres pueden quedar empatadas, lo que complicaría más aún la situación.
Y que ya los panistas están dudando de los priistas y viceversa. «Ya están ahí con pleito porque piensan que la encuesta la puede ganar la aspirante del PAN, pero en la consulta se la van a robar los priistas. Ya temen que uno le va a robar al otro», apuntó.
Vaticinó que «en estos días se va a ver el pleito entre aquellos que sólo los une el deseo de seguir robando a México. Cuando se hace un pacto por intereses, esas alianzas son muy frágiles y no engañan a nadie», destacó.
Expresó que no importa quién resulte ganador o ganadora del proceso del frente opositor, todos representan lo mismo y no le importa quién salga porque ese frente va a perder de todas maneras pues no tienen programa de gobierno ni cómo enfrentar las realizaciones de la Cuarta Transformación.
También alertó a su propia tropa al explicar la importancia de la unidad en el movimiento Morena, pues es ahí donde radica su gran fuerza. «Quiero que nos unamos, ante todo, que no haya nada ni nadie que nos pueda dividir».
Sin embargo, la tensión entre los precandidatos de la coalición Juntos hacemos historia, que la encabeza Morena, crece de forma preocupante, particularmente entre el excanciller Marcelo Ebrard y la exjefa del gobierno capitalino Claudia Sheinbaum, que son los dos punteros en las encuestas, y se consideran ganadores.
Los márgenes son tan estrechos y ellos dos se han alejado tanto de sus otros cuatro compañeros aspirantes, que Ebrard lanzó una campaña pública definitoria cuando restan solamente ocho días para la encuesta, la cual tituló: «¿Claudia o yo?»
También reveló que «entre Claudia y yo hay dos visiones distintas para el futuro de la seguridad en nuestro país», en las cuales no profundizó, e invitó a todos los morenistas y a las personas en general, a reflexionar sobre «el futuro de México», también sin dar detalles.
Sus declaraciones están en todas las redes sociales, periódicos, noticieros de televisión y radio, y en los debates y paneles de comentaristas. «Tú decides si nos quedamos aquí o subimos al siguiente nivel. Tú decides, o Claudia o Yo», señaló al reiterar lo que todo el mundo sabe: «No pienso en ningún otro cargo que no sea la Presidencia».